Después de casi tres lustros de gobiernos conservadores, Keir Starmer logró regresar a su partido al frente del país europeo.
El Partido Laborista ganó las elecciones legislativas de Reino Unido de este jueves, de acuerdo con sondeos de salida, con lo que se terminan 14 años de gobiernos conservadores, en los que el país tomó la decisión de salir de la Unión Europea. Keir Starmer se perfila para suceder a Rishi Sunak como primer ministro.
El Partido Laborista está listo para ganar con mayoría de 170, según una encuesta de salida para la BBC, ITV y Sky. Si el pronóstico es exacto, significa que Sir Keir Starmer se convertirá en primer ministro con 410 parlamentarios laboristas, justo por debajo del total de Tony Blair en 1997.
Por su parte, el partido de extrema derecha Reform UK, de Nigel Farage, uno de los impulsores del Brexit, haría una entrada en el Parlamento con más fuerza de lo previsto, con 13 escaños, quedando detrás del Partido Liberal Demócrata (centro), que obtendría 61, según las estimaciones.
Por su parte, los independentistas escoceses, terceros en las elecciones de 2019, sufrirían un duro revés con diez escaños ganados en las 57 circunscripciones en que concurrían.
Los resultados oficiales finales se conocerán durante la madrugada británica, pero estas estimaciones no dejan dudas de que se abre un nuevo capítulo en la historia política del Reino Unido, con el laborista Keir Starmer, de 61 años, como próximo primer ministro.
¿Por qué ganaron los laboristas?
El brexit en 2020 y sus consecuencias para la economía británica, el covid y el aumento del costo de vida han incidido en la caída conservadora.
El Partido Conservador, con luchas internas y sumido en una profunda crisis, estaba en el poder desde mayo de 2010, primero con David Cameron como primer ministro, seguido por Theresa May y luego Boris Johnson.
Por su parte, al laborista Starmer parece haberle dado resultado el hecho de acercar a su partido hacia posiciones más de centro tras la derrota en las elecciones de 2019 de su antecesor, Jeremy Corbyn, de corte más izquierdista.
El líder laborista prometió en su programa una gestión cautelosa de la economía, dentro de un plan de crecimiento a largo plazo que incluye potenciar los criticados servicios públicos, en particular el denostado sistema de salud.
“Lo importante es hacer crecer la economía y crear riqueza”, dijo Starmer, que carece del carisma del exprimir ministro Tony Blair, quien también terminó con 18 años de gobiernos conservadores en 1997.
En el sur de la capital, Mark Bevington, un contable de 52 años, se mostró esperanzado: “El hecho de que un nuevo gobierno haya tenido la oportunidad de reflexionar, mientras estaba en la oposición, sobre lo que quiere hacer me parece sano”.
¿Subirá los impuestos?
Starmer tratará en las próximas semanas de tranquilizar a los electores, tras las acusaciones repetidas de su rival Sunak de que los laboristas subirán los impuestos.
“Voté a los conservadores para frenar la mayoría absoluta laborista, lo que se traduciría en impuestos mayores para una generación”, escribió Sunak este jueves en las redes sociales.
Starmer intentó esta semana eliminar los temores creados por Sunak en ese sentido.
“No habrá ningún aumento del impuesto sobre la renta, la seguridad social o el IVA”, respondió poco antes de la jornada electoral, insistiendo en su campaña en que solo subirá las tasas a ciertos contribuyentes, entre ellos escuelas privadas o empresas del sector de hidrocarburos, pero no a los trabajadores.
Starmer ya anunció que abandonará el proyecto conservador de fletar aviones a Ruanda con inmigrantes irregulares para combatir las llegadas masivas de personas cruzando el Canal de la Mancha, que separa Inglaterra y Francia.
El líder laborista apuesta por luchar contra las mafias que sustentan esta llegada de inmigrantes irregulares.
Con información de AFP
Keir Starmer carece del carismo de otros primeros ministros laboristas, pero logró rescatar al partido después de la debacle de las elecciones de 2024. (FOTO: REUTERS/Phil Noble)