REUTERS
La representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai y la ministra de Comercio de Canadá, se reunieron para platicar sobre las reformas en México
La ministra de Comercio de Canadá, Mary Ng, y la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, hablaron el martes sobre trabajar juntas para abordar los “desafíos compartidos” con respecto a las reformas del sector energético y minero de México, según un comunicado del ministerio canadiense.
En una reunión, Ng y Tai también discutieron temas relacionados con el comercio entre Canadá y Estados Unidos, incluidos los aranceles sobre la madera blanda canadiense y las disposiciones de la política estadounidense Buy America, según el comunicado.
El pasado martes 25 de abril, Mary Ng, ministra de Comercio internacional de Canadá, solicitó explicaciones a la secretaria Raquel Buenrostro, titular de la Secretaría de Economía, sobre las reformas a la Ley Minera, propuestas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
A través de un comunicado difundido por la ministra canadiense, se informó que Canadá expresó “su preocupación“ por dichas reformas, ya que pueden afectar la inversión canadiense en el sector minero mexicano y que además la modificación a las leyes podría atraer “portenciales” impacto en la competitividad de América del Norte.
“Se reiteró la importancia de realizar consultas amplias y transparentes con todas las partes interesadas sobre las reformas propuestas, incluidas las empresas canadienses, que representan el grupo más grande de inversionistas extranjeros en el sector minero de México”,informó la ministra Ng.
La funcionaria reiteró los importantes aportes de las empresas mineras canadienses a la economía mexicana, y destacó la necesidad de que Canadá y México trabajen aún más cerca dada la importancia de la minería para la economía verde del futuro.
Mary Ng instó a México a asegurarse de mantener el espíritu de compromisos asumidos por los Líderes en la Cumbre de Líderes de América del Norte y de los compromisos del TMEC.
Con la reforma, la duración de las concesiones mineras se reduce de cincuenta años a treinta, de los cuales cinco se destinarán a la exploración o actividades preoperativas. Las concesiones podrán prorrogarse en una ocasión por un lapso de 25 años, siempre y cuando no hayan incurrido en las causales de cancelación.
|| Con información de Diego Aguilar ||