Está por entrar en vigor una norma que prohibirá lo que ya está prohibido.
Se trata de la Norma Oficial Mexicana 187 (NOM 187), con la que, como lo instruyó el presidente Andrés Manuel López Obrador, quedará prohibido elaborar y comercializar tortillas con maíz transgénico.
Es parte de la política del actual gobierno que busca proscribir de México el uso de maíz genéticamente modificado o transgénico.
Es una decisión gubernamental que lo confronta con su principal socio comercial: Estados Unidos.
Pero más allá del pleito por el que el gobierno de México ya fue llamado a consultas bajo el mecanismo de solución de controversias por parte de EU, la NOM 187, tendrá sus propias repercusiones en la cadena de producción y elaboración de uno de los productos más consumidos en la mesa de los mexicanos.
La regulación que dispone la NOM-187, es redundante e innecesaria. ¿Por qué?. Porque ya está prohibida la producción y la importación de maíz genéticamente modificado, advierte el Consejo Consultor de Mercados Agrícolas, encabezado por Juan Carlos Anaya.
Prohibir la elaboración y comercialización de tortillas con maíz genéticamente modificado, en consecuencia, ya está de más.
Adicionalmente, la NOM 187, contiene una serie de disposiciones y obligaciones que tendrán que cumplirse entre los participantes en la cadena de producción de la tortilla que podría llevar a la elevación de su precio final al consumidor.
Además de que es incierta la supervisión y control del cabal cumplimiento por parte de la norma por parte de la Cofepris.
La NOM 187 está dirigida a los establecimientos que elaboran tortilla de harina y de masa de maíz.
Es cierto que tiene otras disposiciones positivas. En particular las que tienen que ver con los temas sanitarios y de inocuidad.
Sin embargo, el universo de participantes en la cadena de producción y comercialización de la tortilla es tan grande como diferenciado.
Es decir, existen grandes empresas de harineros y molineros y grandes cadenas de tiendas de autoservicio, en las que se fabrican y expenden tortillas y al mismo tiempo coexisten entre 100 mil y 110 mil tortillerías de todos tamaños en todo el territorio nacional en la economía formal, más las que operan en la informalidad.
Lo más probable es que se requerirá de un etiquetado que garantice que las tortillas son libres de maíz genéticamente modificado.
No será tarea fácil para los más de 5 mil molinos de nixtamal en el país, implementar los mecanismos necesarios para lograr la trazabilidad de su producto.
Y en las tortillerías, sobre todo las que pertenecen al universo de las MiPymes, se abrirá un enorme espacio para la la corrupción.
Bajo la acusación de que están expendiendo tortillas con maíz transgénico cuántas tortillerías podrían ser clausuradas o víctimas de la extorsión.
La NOM 187 fue revisada, pero sin la participación de los representantes privados, y está en la Conamer para comentarios.
Al ser una instrucción presidencial lo más probable es que se apruebe sin mayores trámites.
El problema es que una vez que entre en vigor se abrirá un reducido espacio de 60 días para que todos los participantes tomen las medidas necesarias para el cumplimiento de la norma.
Los involucrados en esta cadena de producción no sólo consideran que requieren más tiempo, sino que necesitan incluso de financiamiento.
Requieren una política pública de apoyo para su transformación.
Lo más curioso del caso es que la NOM-187 vendrá a prohibir, algo que ya está prohibido, el uso de maíz geneticamente modificado para consumo humano.
Está prohibida su producción en México y su importación. Sólo está permitida la importación de maíz amarillo genéticamente modificado para consumo forrajero e industrial.
El martes de la semana pasada, la Secretaría de Salud envío a la Conamer el anteproyecto para la implementación de la NOM-187, con la que se prohíbe el uso de maíz transgénico para el consumo humano en la tortilla y tostada mexicana.
La prohibición en realidad ya existía desde el pasado 13e de febrero., Sin embargo, se registraron contratos pactados previamente y llegaron cargamentos de maíz blanco genéticamente modificado de EU y Sudáfrica identificados en los meses de marzo y abril.
Lo más probable es que para los meses de julio y agosto tales cargamentos ya habrán sido consumidos.
No obstante, ahí viene la NOM-187 a prohibir lo que ya está prohibido y a regular la industria de la tortilla con el potencial riesgo de que aumenten los precios de ese producto. Al tiempo.