Carecen de sustento científico campañas de greenwashing: UE

(CLARA ZEPEDA. LA JORNADA)

La mitad de las afirmaciones sobre algún tipo de producto, servicio o protocolo verde en Internet carece de sustento científico.

De acuerdo con datos del monitoreo constante de la Comisión Europea a sitios web y el uso de greenwashing, alrededor de 50 por ciento de las afirmaciones sobre protocolo verde en Internet carece de sustento científico; paralelamente, el reporte Corporate Climate Responsibility Monitor del New Climate Institute ha mostrado que los resultados de cero emisiones de las 25 compañías más grandes del planeta están sobrestimados.

“A lo largo de las últimas décadas se ha tomado conciencia de manera generalizada sobre los problemas que implican la crisis ambiental y el cambio climático para las futuras generaciones. Con ello, se han adoptado prácticas y estándares de calidad en empresas que buscan ser más amables con el medio ambiente. Sin embargo, con frecuencia sobrestiman su impacto con miras a tener buena publicidad en términos verdes, o crearse una imagen de empresa comprometida con el clima y caen en lo que se conoce como greenwashing”, explicó MEDU Protection.

No hay ninguna empresa 100 por ciento sustentable, por esto se debe ser transparentes y honestos a la hora de comunicar logros y acciones, explicó Tamara Chayo, directora y cofundadora de MEDU Protection, startup mexicana dedicada a la fabricación de indumentaria médica sustentable y segura.

Es importante que todos los esfuerzos verdes y la medición de impacto positivo en el medio ambiente sean transparentados. Es decir, una empresa debe comunicar tanto a público como a inversionistas, incluso a sus mismos colaboradores, estos protocolos. Sin embargo, toda esa información debe ser verdadera e inteligible.

Cualquier empresa comprometida con el medio ambiente y que sea transparente con su información debe recurrir a auditorías y revisiones externas para que haya frenos y contrapesos a las decisiones que se toman, señaló.

Ecoblanqueo

De acuerdo con la definición de Greenpeace, el greenwashing (ecoblanqueo) es el acto de confundir a los consumidores en relación con las prácticas medioambientales de una compañía o los beneficios ecológicos de un producto o servicio.