(ROXANA GONZÁLEZ. EL SOL DE MÉXICO)
Activistas señalan que esta decisión brinda más oportunidades a
El número de mujeres estadounidenses que refieren el aborto como motivo de su viaje a nuestro país aumentó 42 por ciento a partir del pasado 6 de septiembre, cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México resolvió despenalizar el aborto a nivel federal, revela un reporte de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos.
Los puentes fronterizos que comunican a Texas con Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y Chihuahua, registraron un total de 47 cruces, frente a los 19 en el resto de la frontera. Texas es uno de los estados de la Unión Americana que prohíben totalmente el aborto.
El incremento sucede a pesar de que la resolución del máximo tribunal de México no despenaliza automáticamente el aborto en el país ya que todavía hay 20 estados que aún lo castigan en sus códigos penales.
En entrevista con El Sol de México, Ximena Mendoza, abogada del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), responsable junto a otras organizaciones del amparo judicial tras el cual la Suprema Corte se pronunció a favor de la despenalización, explicó que lo que procede es que el máximo tribunal publique detalladamente los términos de los efectos que se concedieron para que, después, el juzgado de distrito, quien será el encargado de verificar el cumplimiento, notifique al Congreso y al Ejecutivo. Hasta entonces entrará en vigor y con ello los proveedores federales de asistencia sanitaria, es decir las instituciones públicas del sector salud como el IMSS e ISSSTE, estarán obligadas a practicar interrupciones del embarazo en todo el país.
El proceso para que ello comience a suceder tardará todavía entre dos y tres meses, estima Mendoza.
La activista consideró que el aumento de la llegada de estadounidenses a México para abortar es de esperarse por la difusión en todo el mundo que tuvo la decisión de la Corte, pero sobre todo, como consecuencia de los retrocesos de los últimos años en la Unión Americana.
En junio del 2022, la Corte Suprema estadounidense revocó la histórica decisión sobre el derecho al aborto Roe vs. Wade —litigio de 1973 que dictaminó que la Constitución protege la libertad de una mujer embarazada para interrumpir su embarazo sin excesivas restricciones gubernamentales— que quitó la protección federal al aborto y dejó en manos de los estados la prohibición o no de este. Desde entonces, 14 estados de los 50 que conforman el país lo han prohibido totalmente.
“El haber terminado con este precedente ha ocasionado que haya mucha incertidumbre y miedo entre las estadounidenses”, dijo Mendoza.
Consideró, también, que la experiencia mexicana tiene lecciones que ofrecer a las activistas del vecino país que luchan ahora por el derecho al aborto estado a estado. Según dijo, es vital conseguir apoyos poco a poco con la vista puesta en lograr cambios políticos en el largo plazo. “La decisión de la Corte en México representa más oportunidades para las mujeres en zonas restrictivas de Estados Unidos”, agregó.
Desde hace años las estadounidenses han recurrido a redes de apoyo en las que conocedoras del procedimiento “aborto seguro en casa”, realizan acompañamientos desde México a aquellas que buscan interrumpir su embarazo mediante la utilización de medicamentos de libre venta como el Misoprostol.
De acuerdo con Anna, una mujer de 34 años, quien realiza desde hace cinco este tipo de acompañamientos en Ciudad Juárez, Chihuahua —uno de los estados de la República donde el aborto aún está penalizado—, sólo el año pasado la organización a la que pertenece asistió a 192 estadounidenses en la interrupción de sus embarazos mediante el procedimiento de aborto seguro.
En conversación con este diario, explicó que la asistencia consiste en ofrecer información sobre el aborto seguro con Misoprostol, medicamento autorizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para interrumpir el embarazo.
“Un acompañamiento es el proceso en que una mujer orienta a otra a practicar un aborto a través de medicamentos de libre venta. Es orientar y ayudar a la persona a obtener acceso al medicamento, enseñar los signos de alarma, acompañar antes, durante y después del proceso, procurando la salud física y mental de quien está pasando por un embarazo no deseado y ha decidido no continuarlo”, afirmó.
La OMS refiere en su página en internet que el Misoprostol es un medicamento que no requiere receta médica para su compra en México. No así para la mayoría de los estados que integran la Unión Americana donde su prescripción está completamente bajo regulaciones federales y sólo puede ser recetado en personas por un médico durante las primeras siete semanas de embarazo.
Anna asegura que a partir de la decisión de la SCJN ha recibido el doble —unas doce— solicitudes de acompañamiento e incluso le han solicitado información para abortar en México.
De 2007 a la fecha, 12 estados despenalizaron el aborto en México, 10 por aprobación de sus congresos locales y dos por resoluciones de la SCJN.
La Ciudad de México fue la primera entidad en despenalizar el aborto el 24 de abril de 2007, 12 años después lo hizo Oaxaca, el 25 de septiembre de 2019, seguidos de Hidalgo, Veracruz, Baja California, Sinaloa, Colima, Guerrero, Baja California Sur y Quintana Roo, cuyos Congresos despenalizaron la interrupción del embarazo. Coahuila, en 2021, y Aguascalientes, en 2023, fueron obligados por la Corte.