JORGE RICARDO. REFORMA.- La renuncia del Banco del Bienestar (BB) al mercado de remesas, que el año pasado superó los 58 mil millones de dólares, sorprendió hasta la banca privada, que aseguró que esta decisión afectará a las personas más pobres.
Un reporte del centro de análisis de BBVA Research publicado la semana pasada refiere que esta medida ocasionará un aumento en el costo de traslado de los receptores de las remesas, al disminuir los puntos de pago en zonas rurales y semirurales del País.
“Las sucursales del Banco del Bienestar y su red de corresponsales tenían una cobertura de 935 municipios en 2021, y en algunos de estos eran la única institución que ofrecía servicios financieros y de liquidación de remesas”, se indica en el documento.
“Debido a la falta de infraestructura, y algunas veces a la comodidad para realizar compras, muchos habitantes en zonas rurales y semirurales deben desplazarse a otros municipios y centros urbanos para realizar el cobro de sus remesas”, agrega.
En su reporte, BBVA Research señala que con la salida del BB del mercado de las remesas, en especial con las transferencias realizadas a través de las instituciones de Ahorro y Crédito Popular, es posible que se presenten cambios en la intensidad del pago de estos recursos en todo el País, aumentando la concentración en algunos municipios y centros urbanos con puntos de pago.
El 25 de marzo, el Banco del Bienestar informó que por “decisión propia” abandonaba el servicio de remesas, que presumía como el más eficaz y beneficioso, para concentrase en el reparto de dádivas.
Con un comunicado, salió al paso también de la sospecha de ser blanco de operaciones de lavado de dinero, luego de que el banco estadounidense Wells Fargo anunció que a partir del 21 de abril no transferiría dinero mediante el BB.
Para BBVA Research, la decisión del Gobierno federal se puede entender por la pérdida gradual de couta de la institución en el mercado de las remesas.
“En 2018, México recibió 33 mil 677 millones de dólares por concepto de remesas familiares, de las cuales Banco del Bienestar (antes Bansefi) pagó cerca de mil 365 millones de dólares lo que equivale a 4.1 por ciento del total.
“Para 2022 se estima que el Banco del Bienestar liquidó mil 392 millones de dólares en remesas de un total de 58 mil 510 millones que llegaron a México, lo que representó una cuota de mercado de 2.4 por ciento”, refiere.
En un reporte publicado en la semana, Citibanamex atribuyó el crecimiento de las remesas en México a “los enormes apoyos del gobierno de EU durante la pandemia” y el aumento de migrantes mexicanos en ese país.
Indicó que los controles contra el lavado se han fortalecido, pero reconoció que es casi imposible hacerlo ante pequeñas cantidades.
“También citamos las dificultades que las autoridades de EU han declarado encontrar en la correcta aplicación de los controles de esa actividad. Dado el bajo monto de la remesa promedio, al mismo tiempo que es más difícil mantener un control sobre todo los envíos”, afirmó.
Piden indagar sospecha de lavado
Detrás de la decisión del Gobierno federal de retirar el Banco del Bienestar (BB) del mercado de las remesas está la sospecha del lavado de dinero, indicó el especialista en seguridad Carlos Mendoza.
En entrevista, sostuvo que al salir del mercado de las remesas, el BB está tratando de evitar problemas futuros, toda vez que tener recursos involucrados en lavado de dinero no sólo desacreditaría a la institución sino que implicaría la suspensión de algunas de sus actividades, entre ellas la dispersión de los programas sociales.
“Creo que esto amerita mecanismos de supervisión mucho más puntuales por parte de las instituciones financieras”, indicó.
El especialista señaló que un tema que se tiene que investigar a fondo es el creciente flujo de remesas en el País.
Aseguró que las remesas normalmente tienen un comportamiento estacional, porque los mexicanos que migran, sobre todo a Estados Unidos, tienen comportamientos regulares, ya que los primeros meses e incluso los primeros dos años de su estancia en ese país son generosos en sus envíos, pero una vez que se estabilizan y comienzan a generar gastos, el flujo de éstos se reduce.
“Las remesas normalmente no crecen sino que se mantiene estables, y solamente son variables dependiendo del número de nuevos paisanos que se van a Estados Unidos; sin embargo, hemos tenido un crecimiento notable en el volumen de las remesas, lo cual hace pensar que algo está sucediendo con este flujo creciente”, dijo.
Con información de Martha Martínez.
La renuncia del Banco del Bienestar al mercado de remesas sorprendió a la banca privada, que aseguró que la decisión afectará a los más pobres. Foto: Especial.