(OCTAVIO AMADOR. EL ECONOMISTA)
El gasto agregado en bienes y servicios de las familias mexicanas descendió 0.6%, en medio de un debilitamiento del mercado laboral y una mayor cau
De enero a marzo del 2025 el gasto de consumo efectuado por las familias mexicanas se contrajo 0.6% interanual, en lo que significó su primer descenso para un período comparable desde el 2021, cuando cayó 3.4%, de acuerdo con cifras publicadas este miércoles por el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
De forma desagregada, el descenso se explicó por una contracción de 5.2% en el consumo de bienes de origen importado, que no pudo ser compensado por el alza de 0.6% en el consumo de bienes servicios de origen nacional, muestran los datos del Indicador Mensual del Consumo Privado (IMCP), del Inegi.
El descenso del consumo coincide con factores mixtos cuyos riesgos tienen sesgos al alza. Del lado del mercado laboral se observó una caída de 14.4% en la generación de empleo formal a 226,731 plazas durante el trimestre, de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Al considerar el empleo agregado –formal e informal–, lo que se vio fue una pérdida de 119,896 empleos en comparación interanual, lo que implicó el peor arranque de año del mercado laboral desde el 2011, cuando se perdieron casi 270,000 plazas.
En contrapunto, el salario en la economía formal mantuvo su trayectoria de recuperación, con un repunte de 3.4% real del sueldo medio de cotización ante el IMSS al mes de marzo.
Las remesas familiares recibidas del exterior crecieron 1.3% a 14,269 millones de dólares durante el primer trimestre, sin embargo, el índice de confianza del consumidor cayó 0.4 puntos de forma mensual y 1.3 puntos en el comparativo anual, hilando cinco y tres meses en terreno negativo, respectivamente.
En general, la perspectiva para la creación de empleo formal es de menor vigor, con un pronóstico promedio de 227,000 nuevas plazas creadas (nivel similar al observado en el 2024), según la encuesta de mayo aplicada a los especialistas en economía por el Banco de México, que en enero veían 321,000 nuevos empleos para el cierre de este 2025.
Resultados mensuales
Solo en marzo, el consumo privado se contrajo 0.2% mensual, mientras que de forma interanual cayó 1.3%, hilando cuatro meses en contracción.
En la comparación mensual, el gasto en bienes y servicios nacionales bajó 0.5%, mientras que el efectuado en productos de origen importado creció 0.4 por ciento.
La caída del consumo privado en el arranque del 2025 también coincidió con un descenso en la inversión fija, el otro gran componente de la demanda agregada, que cayó 4.9 por ciento.
El menor dinamismo de ambos indicadores ocurre en medio de la incertidumbre detonada por cambios políticos en Estados Unidos y México que impactan el entorno de negocios.
En el frente internacional se observa un endurecimiento de la política arancelaria de Estados Unidos por iniciativa de su presidente, Donald Trump.
Este giro afectó a incluso a los socios comerciales con los que tiene tratados comerciales, como México y Canadá, lo que ha generado dudas respecto del futuro del T-MEC y de la integración comercial de América del Norte.
En tanto, en el frente doméstico persiste la expectativa sobre la implementación de reformas constitucionales como la judicial, energética y la que mandata la reorganización del ecosistema regulatorio de competencia y telecomunicaciones.
Apenas este lunes, la Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado que realiza el Banco de México, arrojó una reducción de la media de crecimiento pronosticada a apenas 0.08%, desde el 0.11% del abril y ya lejos del 1.17% que se esperaba en diciembre del 2024.
