IVONNE MARTÍNEZ. LA RAZÓN
Comercio y manufacturas registran la mayor creación de plazas, con alrededor de un millón en los últimos 12 meses; la cifra de gente sin laborar se elevó a casi 33 millones
La tasa de desocupación en México se ubicó en un nivel mínimo histórico de 2.4 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) en marzo del 2023, lo que representa 1.4 millones de personas desempleadas, aunque el número de quienes trabajan en la informalidad llegó a casi 33 millones.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que, respecto a febrero de este año, la población desocupada descendió en 185 mil personas y fue menor respecto a la tasa de 2.7 por ciento, mientras que, en comparación con marzo del 2022, disminuyó en 287 mil personas y también resultó por debajo del 3.0 por ciento de la PEA.
El organismo refirió que la población ocupada ascendió a 59 millones de personas en marzo, cifra superior en 668 mil 925 respecto a febrero pasado y 2.4 millones más que en marzo del 2022.
Apuntó que, de la población ocupada por sector de actividad, los servicios concentraron a 25.6 millones de personas (43.4 por ciento del total); el comercio, 11.5 millones (19.4 por ciento); la industria manufacturera, 9.9 millones (16.8 por ciento); las actividades agropecuarias, 6.5 millones (11 por ciento); la construcción, 4.8 millones (8.1 por ciento) y “otras actividades económicas” —que incluyen la minería, electricidad, agua y suministro de gas—, 433 mil (0.7 por ciento). Por su parte, 360 mil personas (0.6 por ciento) no especificaron su actividad.
Mencionó que, en comparación con el mismo mes del 2022, los sectores con mayor incremento en su población ocupada fueron: comercio con 669 mil personas e industria manufacturera con 429 mil.
A su interior, las personas subocupadas —las que declararon tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas— fueron 4.0 millones en marzo, esto es una reducción de 278 mil personas respecto a febrero y 742 mil menos con relación a marzo del 2022.
Así, la PEA fue de 60.5 millones de personas en marzo, población mayor en 483 mil 828 a la de febrero de este año, y también superior en 2.1 millones de personas con relación a marzo del 2022.
En tanto, la población ocupada en la informalidad laboral fue de 32.4 millones de personas en marzo del 2023, lo que significa 55 por ciento de la población ocupada.
Esta cifra de informalidad laboral es superior en 71 mil 367 personas respecto a febrero de este año y también es mayor en 862 mil 699 con relación a marzo del 2023.
No obstante, la tasa de marzo del 2023 es menor a la de febrero pasado y de 55.8 por ciento en marzo del año pasado.
El analista económico de Grupo Financiero Monex, Marcos Arias, resaltó que, en línea con la sorpresa que brindaron las poderosas cifras del Producto Interno Bruto (PIB) del primer trimestre del año, las estadísticas laborales de marzo se ubicaron en sus mejores niveles de la historia económica reciente.
La tasa de desempleo, por ejemplo, bajó de 2.72 por ciento, un registro que de por sí ya había marcado un mínimo de 18 años, hasta 2.39 por ciento, lo que la coloca como la más baja de los países del Grupo de los Veinte (G-20), algo que tampoco había sucedido con anterioridad.
“El mercado laboral parece reflejar la contundencia de las tendencias de reciente aparición en la economía mexicana y provee evidencia sobre la magnitud de las oportunidades que proyecta el nearshoring en los años por venir”, subrayó.
Analistas de Banorte destacaron que las cifras de marzo refrendan que el mercado laboral en México no sólo mantiene una posición sólida, sino que sigue mejorando, por lo cual anticipan que esta fortaleza continuará en los próximos meses, con mayores riesgos hacia finales del año.
“Consideramos que el mercado laboral se encuentra en una posición muy favorable, consistente con un entorno de fuerte crecimiento económico”, subrayó el grupo financiero en un análisis.
Por el momento, agregó, se mantiene una especie de círculo virtuoso, con dicho dinamismo impulsando al empleo, el cual, a su vez, contribuye positivamente al consumo y, por ende, a la actividad.
En este contexto, Banorte estimó que los efectos de dicha fortaleza se extenderán a los próximos meses.
No obstante, precisó, también hay riesgos para el mercado laboral al cierre de año, entre ellos la expectativa de una moderación en la actividad económica, en buena medida por un menor dinamismo de la demanda externa.
FGR