VÍCTOR PIZ. EL FINANCIERO
¿Está garantizada la viabilidad de las finanzas públicas de México? En el corto plazo sí, pero hacia adelante se anticipan presiones de gasto considerables por los proyectos ‘prioritarios’ de infraestructura y el pago de pensiones.
Desde hace meses es evidente el debilitamiento de las finanzas públicas, lo que no se corresponde con el dinamismo que registra la actividad económica en el país.Playvolume
Entre enero y mayo pasados, los ingresos presupuestarios del sector público ascendieron a dos billones 923.8 mil millones de pesos, pero fueron inferiores en 156.8 mil millones de pesos a lo programado para ese periodo de cinco meses, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda.
Además, los ingresos presupuestarios registraron una disminución de 0.4 por ciento en términos reales con respecto a 2022.
Esto la autoridad hacendaria lo atribuye principalmente a “la caída de los ingresos petroleros, que se relaciona con la apreciación del tipo de cambio más que con la disminución del precio internacional del petróleo, en comparación con lo observado en los primeros cinco meses del año anterior”.
Ciertamente, los ingresos del sector público en el periodo enero-mayo de este año fueron inferiores al programa fundamentalmente por menores ingresos petroleros en 202.7 mil millones de pesos.
Cabe señalar que en los ‘Pre-Criterios 2024′, que entregó a finales de marzo el Ejecutivo al Congreso a través de la Secretaría de Hacienda, se estima que los ingresos presupuestarios sean inferiores a los previstos en la Ley de Ingresos de la Federación para 2023 en 131.5 mil millones de pesos.
Esto quiere decir que al cierre del quinto mes de 2023 el ‘boquete’ en los ingresos supera en más de 25 mil millones de pesos el monto esperado para todo el año.
Los ingresos tributarios también registraron un faltante, pues en el periodo enero-mayo ascendieron a un billón 924 mil millones de pesos y quedaron en 67.6 mil millones por debajo de los programados para esos cinco meses.
Sin embargo, los ingresos tributarios aumentaron 3.0 por ciento en términos reales con respecto al periodo comparable de 2022.
Esto, según Hacienda, se explica por “el buen desempeño del mercado laboral y por las ganancias de las empresas, factores que favorecieron un aumento real anual del ISR de 3.1 por ciento”.
El ISR muestra un nivel superior en 46.4 mil millones de pesos con respecto a lo programado.
La captación del IVA, asociada al desempeño de la economía y el consumo, se ubicó 81 mil millones de pesos por debajo de lo previsto y se contrajo 5.2 por ciento en términos reales en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Quiere decir que lo que se gana por mayores ingresos en el ISR, se pierde por menores entradas en el IVA.
En la otra cara de la moneda, el gasto neto total acumulado en los cinco meses sumó 3 billones 78 mil millones de pesos contra un monto programado de 3 billones 324.3 mil millones.
Esto implicó un subejercicio de 246.4 mil millones de pesos en enero-mayo de este año.
En su interior, el gasto programable del gobierno fue 74.3 mil millones de pesos inferior al proyectado.
Por el contrario, el costo financiero superó lo previsto en 3 mil millones de pesos y tuvo un incremento de 49.4 por ciento debido a las mayores tasas de interés.
“Al tener un hoyo que viene creciendo desde abril, Hacienda no lo ha hecho de manera formal, pero sí se puede observar que tenemos un ajuste en el gasto, el cual está compensando esta disminución en los ingresos”, afirma Adriana Hortiales, consultora en finanzas públicas.
En el mismo sentido, analistas de Citibanamex estiman que el faltante de ingresos permanezca en el resto del año dada la desaceleración económica esperada y las mayores tasas de interés.
“Pensamos que el faltante se compensaría parcialmente con activos financieros y recortes de gasto”, según una nota sobre la marcha de la economía.
Si formalmente no hay recortes, como dice Hortiales, lo que se advierte es una contención del gasto público ante el faltante de ingresos.
Es importante que las autoridades hacendarias generen confianza de que el deterioro en las finanzas públicas no está siendo subestimado.