(MARÍA LUISA SANTILLÁN, CIENCIA UNAM-DGDC)
En algunas regiones del Estado de México, Morelos, Puebla, Oaxaca, Guerrero, Colima, Jalisco y Michoacán es posible encontrar la llamada hierba del borracho, también conocida como hierba de monte, poleo o tochel.
Su nombre científico es Clinopodium macrostemum; pertenece a la familia Lamiaceae, que es una muy extensa, pues cuenta con alrededor de 236 géneros y 7,173 especies. Es una planta endémica de México, que además es pariente del toronjil y la lavanda.
Tiene distintos beneficios, algunos de los que conocen hasta el momento son gastrointestinales, pues sirve para curar problemas estomacales o diarrea –sobre todo por alimentos contaminado con E. choli–. También ha ganado popularidad por ayudar a aliviar la resaca y a las personas con problemas para dormir.
“Este té en algunas zonas lo implementan para ponerlo en los ponches cuando es la época decembrina, sobre todo en la parte de Milpa Alta, al sur de la Ciudad de México; y en el Estado de México lo utilizan en rituales, por ejemplo, en bodas, en donde tiene un significado de abundancia y fertilidad”, explica la doctora Nohemí Escamilla, integrante del Laboratorio de Biología de Raíces del Jardín Botánico de la UNAM.Lee también
CARACTERÍSTICAS.
Entre los aspectos que caracterizan a esta hierba se encuentra su aroma mentolado. Sus tallos son erectos y pubescentes, es decir, tiene vellos que le ayudan ante los cambios abruptos del ambiente y también le sirven para retener el agua, pues al ser del tipo herbácea, se deshidrata muy fácil, por lo que requiere de bastante cuidado.
Es una planta arbustiva que no crecerá mucho, pues mide alrededor de un metro de altura y sus hojas son aserradas de entre 3 y 4 centímetros. Su floración es en épocas de frío, de diciembre a febrero, y es una planta que prefiere el clima boscoso y fresco, y las sequías la afectan mucho. Además, de que su flor es entre rojiza o anaranjada.
La doctora Escamilla explica que no es una planta tan conocida porque su uso es más local, sobre todo en las comunidades en donde crece, aunque ya se encuentra en el listado de la Farmacopea, un documento en donde se establecen todos aquellos fármacos, aditivos, medicamentos, productos biológicos o cualquier producto para la salud.
Para consumirlo de manera segura, se debe poner a hervir un litro de agua, posteriormente colocar una ramita de la hierba de alrededor de 10 cm, tapar la olla y dejar enfriar. Para las personas que sufren de insomnio puede tomarse con leche, pues se sabe que es relajante.
MÉTODOS DE PROPAGACIÓN.
“Desafortunadamente no hay muchos productores que cultiven la planta, la cual no es fácil de propagar, hasta el momento nada más conocemos a dos, uno de Milpa Alta y otro de Ecatzingo, Estado de México”, comenta la doctora Escamilla.
Dentro del Jardín Botánico de la UNAM se estudian algunas propuestas de propagación de esta planta. Una de ellas consiste en hacerlo vegetativamente, por estacas, brindándole condiciones de humedad relativa alta y que sea de manera sustentable.
“La propuesta es propagarla por medio de aserrín, que es un desecho industrial y que es mucho más económico; nosotros estamos en esa parte experimental y hemos visto que sí nos está dando resultados”.
Para lograr este trabajo, la doctora Escamilla ha trabajado de la mano con productores de la hierba del borracho de Ecatzingo, Estado de México, quienes desde hace cuatro años han empezado a cultivarla de manera más constante y hasta el momento tienen más de 4 mil plantas.
*Colaboración de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM
La planta se cultiva en Ecatzingo, Estado de México, y en Milpa Alta, Ciudad de México. Foto Nohemi Escamilla/Diseño Bárbara Castrejón