(CHU DAYE, TAOMINGYANG Y NI HAO. GLOBAL TIMES)
La deuda pública del gobierno federal de Estados Unidos se ha disparado a un ritmo vertiginoso hasta alcanzar una cifra sin precedentes de 35 billones de dólares, batiendo el récord establecido hace apenas unos meses y enviando nuevas preocupaciones al mercado global. La lectura volvió a recordar al mundo la bomba de relojería a la que se enfrenta como resultado de una serie de decisiones irresponsables tomadas por el gobierno estadounidense, dijeron el martes los observadores chinos.
Los datos del Departamento del Tesoro de Estados Unidos publicados el lunes por la tarde (hora de Estados Unidos) mostraron que la deuda nacional bruta alcanzó los 35.001.278.179.208,67 dólares. Eso equivale a 104.497 dólares por persona en Estados Unidos.El alarmante hito se produce apenas unos meses después de que Estados Unidos eclipsara el umbral de los 34 billones de dólares a principios de enero de 2024, mientras que la marca de los 33 billones de dólares se alcanzó en septiembre de 2023, según el medio de comunicación estadounidense Fox Business.
En comparación, la deuda nacional de Estados Unidos rondaba los 907.000 millones de dólares hace apenas cuatro décadas.El hito de la deuda ha suscitado nuevas advertencias dentro de Estados Unidos.
“Vamos a tener que tomarnos en serio la deuda, y pronto. Los años electorales no pueden ser una excepción para tratar de prevenir peligros completamente previsibles, y la deuda es uno de los mayores peligros que enfrentamos”, dijo Maya MacGuineas, presidenta del Comité no partidista para un Presupuesto Federal Responsable, en un comunicado.
Los analistas chinos dijeron que aunque Estados Unidos podría salirse con la suya en el tema de la deuda a corto y mediano plazo con varios acuerdos, como aumentar constantemente su techo de deuda, hay crecientes preocupaciones globales sobre la deuda de Estados Unidos y su deseo egoísta de expandirla irresponsablemente para satisfacer necesidades políticas y económicas inmediatas.
Song Guoyou, subdirector del Centro de Estudios Estadounidenses de la Universidad de Fudan, comparó la creciente deuda estadounidense con un lago que se cierne sobre las cabezas de todos.
“El mundo solo puede estar seguro de una cosa, es decir, no se puede decir cómo Estados Unidos lidiará con su creciente deuda nacional al final, y cuáles serán las consecuencias de estas medidas”, dijo Song al Global Times el martes
.”Debemos estar alerta ante la posibilidad de una crisis financiera en Estados Unidos, o incluso una crisis económica derivada de su creciente deuda”, dijo Song.Ma Wei, investigador del Instituto de Estudios Estadounidenses de la Academia China de Ciencias Sociales, dijo el martes al Global Times que las crecientes preocupaciones del mercado sobre la deuda han hecho que muchos tenedores de deuda estadounidense pierdan la confianza, y muchos han comenzado a reducir sus tenencias en los últimos años, un proceso exacerbado por el uso del dólar como arma por parte de Washington para imponer sanciones contra varios países.
Los mercados emergentes son particularmente vulnerables, ya que el posible aumento de los rendimientos de la deuda estadounidense elevará indirectamente los costos del servicio de su deuda, dijo Ma, señalando que estos países enfrentan los peligros de devaluaciones de la moneda, salidas de capital y desequilibrios en sus pagos internacionales debido al abuso de la hegemonía financiera de Estados Unidos.
Los observadores dijeron que el rápido aumento de la deuda estadounidense fue causado por la ola de gastos del gobierno estadounidense después de la pandemia de COVID-19, mientras que no había habido un aumento notable en los ingresos del gobierno estadounidense, lo que resultó en un aumento del déficit fiscal.
El próximo presidente de Estados Unidos enfrentará plazos fiscales que se avecinan el próximo año, y uno de los primeros plazos de ese tipo llegará el 1 de enero, cuando expirará la actual suspensión del límite de la deuda. Para entonces, los legisladores estadounidenses se verán obligados a debatir otro aumento o suspensión del techo de la deuda y potencialmente reformas fiscales, mientras que el Departamento del Tesoro utiliza “medidas extraordinarias” para evitar un incumplimiento por un período de varios meses.
En junio de 2023, el Congreso de Estados Unidos aprobó el aumento número 103 del techo de la deuda en el país desde 1945, tras meses de luchas partidistas. El proyecto de ley permitía al gobierno estadounidense evitar un impago de la deuda pidiendo más préstamos.
Los analistas añadieron que la cuestión de la acumulación de deuda dañará aún más el estatus del dólar estadounidense como moneda de reserva mundial, que ya muestra signos preocupantes.
La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, advirtió a principios de mes, al testificar ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, que una de sus preocupaciones es cuál es la mejor manera de proteger el estatus internacional del dólar estadounidense, ya que las sanciones financieras estadounidenses han empujado a más países a buscar métodos alternativos de transacción financiera que no involucren al dólar estadounidense, según informes de los medios de comunicación.
“El mundo sólo puede esperar que Estados Unidos adopte una actitud responsable para solucionar su problema de deuda y construir una ‘presa alrededor del lago barrera’ para convertirlo en un embalse”, dijo Song.
Sin embargo, tal esperanza puede ser una apuesta arriesgada.Bai Xue, analista senior de Golden Credit Rating International Co., dijo el martes al Global Times que el ambiente político tóxico en Estados Unidos ha hecho que sea poco probable que se haga un esfuerzo serio para recortar agresivamente el gasto del gobierno.
“Dado que el dólar todavía disfruta de una hegemonía a corto plazo en medio de una desaceleración del crecimiento económico mundial y el aumento de las tensiones geopolíticas, el escenario más probable sería que el gobierno estadounidense continúe por el camino de ampliar su déficit fiscal y mantenga su deuda en aumento sin control”, dijo Bai.
Ahogándose en deudas Ilustración: Liu Rui/GT