IVENNE MELGAR. EXCÉLSIOR
En una declaración que ilustra la disciplina que las feministas de la autoproclamada Cuarta Transformación guardan ante el presidente de la República, Nadine Gasman, presidenta de Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), pretendió dar línea sobre cómo lidiar con la violencia política en razón de género.
Lo hizo este martes primero de agosto en un evento en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), cuya Sala Superior tomaría definiciones al día siguiente.
“No me lo tomen a mal, porque voy a decir una cosa que es políticamente incorrecta (…) Hay una parte de la política que no es violencia, que es que la política, híjole, y me están grabando, es pinche y pues así es. Hagamos esa división para no banalizar, no victimizarnos y fortalecernos. Hay que entrarle a la política, hay que hacer bien el trabajo, hay que aguantar a veces vara, igual que aguantan los compañeros”.
Como diplomática, activista y política afín al proyecto gubernamental, Nadine Gasman ha justificado el cierre de las estancias infantiles y las escuelas de tiempo completo con la retórica oficialista, a sabiendas que esos programas son indispensables para un sistema nacional de cuidados que dice promover.
Bajo esa lógica de fiel militante, la presidenta del Inmujeres se sumó a la visión de los dos consejeros –Rita Bell López Vences y Jorge Montaño Ventura– que el 20 de julio rechazaron el reclamo de Xóchitl Gálvez de que el mandatario ejercía violencia política en su contra al considerarla un títere del bloque conservador. Eso es parte “de la crítica dura del debate político”, alegó entonces la consejera Rita Bell López.
Pero este miércoles, los magistrados de la Sala Superior del Tribunal instruyeron al INE a revisar otra vez la queja de la senadora del PAN porque en las conferencias del 10, 11, 14 y 17 de julio sí hubo expresiones presidenciales que ningunearon los méritos de Xóchitl Gálvez, al describirla como dependiente de las definiciones de un grupo de hombres.
En respuesta, ayer los tres consejeros de la Comisión de Quejas y Denuncias acataron por unanimidad la resolución del TEPJF e instruyeron al presidente López Obrador que se abstenga de ese tipo de expresiones contra la senadora.
Todavía falta que la Sala Especializada del Tribunal vaya al fondo del análisis. Pero las posturas expuestas marcarán un antes y un después en la calificación de la violencia política en razón de género (VPG) en las elecciones en puerta.
Con una contundencia que será referente en el debate interminable de este tema, la presidenta de la Comisión, la consejera Claudia Zavala, advirtió que, bajo el enfoque establecido por los magistrados del Tribunal, en el INE habrá cero tolerancia con la violencia política, simbólica y con el lenguaje machista que invisibiliza a las mujeres.
Leyó varias de las expresiones presidenciales de las fechas citadas en las que llamó a la legisladora “candidata de los potentados y de los corruptos” y calificó de “farsa” la biografía de la aspirante a conducir el Frente Amplio por México (FAM). Recordó que ya el Tribunal calificó como válidos los procesos en marcha de Morena y del FAM para seleccionar a los titulares de cargos partidistas que, como todos sabemos, derivarán en la postulación de candidaturas presidenciales.
“Y frente a eso”, definió Claudia Zavala en alusión al presidente López Obrador, “tenemos a un servidor público al que le tiene que quedar claro que estas manifestaciones hoy se llaman violencia y esa violencia es inadmisible en nuestro sistema”.
El consejero Montaño Ventura guardó silencio, pero avaló el acuerdo que dio 12 horas a la Presidencia de la República para retirar los materiales de las mañaneras señaladas.
Rita Bell López Vences igualmente votó a favor, no sin antes justificar los dichos presidenciales. “Coincido en que invisibilizar la trayectoria de una mujer por sus méritos es violencia, es parte de la violencia simbólica. Pero también hay que entender que sí estamos todavía en un sistema patriarcal, tampoco hay que negarlo (…) y también se ha manifestado que todavía dentro de los partidos existe esta toma de decisiones finales, no tanto basadas en el liderazgo o en el trabajo de las mujeres, sino en que sigan siendo algunos hombres los que ostentan el poder”.
La consejera Claudia Zavala asumió el debate: “Creo que es un tiempo de cambio, es un tiempo de cero tolerancia, porque no se vale que el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres quede supeditado al patriarcado”.
Asumiendo el argumento que escucharemos entre quienes intentarán seguir defendiendo al Presidente, la consejera López Vences puso sobre la mesa un razonamiento que, de tomarlo a pie juntillas, estaría descalificando toda postulación femenina, incluyendo la de Claudia Sheinbaum: “Tampoco podemos invisibilizar estas voces que señalan que todavía hay que hacer mucho sobre la estructura de quienes toman las decisiones, quienes deciden las candidaturas (…) No podemos negar que este sistema lo sigue detentando en su mayoría los hombres”.
Claudia Zavala cerró la discusión con una reflexión que aludía al aguanten vara de Nadine Gasman.
“Yo no creo que en política tengamos que aguantar nada, nada. Porque, si no, vamos a seguir conservando los esquemas patriarcales. Las políticas no tienen por qué aguantar nada, las mujeres políticas deben saber que su liderazgo va más allá del esquema patriarcal”.
Los caminos están trazados: o aguantamos vara con Nadine o afrontamos ya el patriarcado.