(SILVIA OLVERA. REFORMA)
A poco más de dos años de que entre en vigor la revisión del T-MEC, la American Chamber en Estados Unidos (Amcham) pidió que se eliminara esta cláusula.
John Murphy, vicepresidente senior y director internacional del organismo, señaló que en el 2026 se abrirá la cláusula de revisión sobre el T-MEC, pero considera que es el momento de quitarla.
“Es hora de romper la cláusula de caducidad del término. Lo que presenta el acuerdo es una revisión por parte de los tres Gobiernos de cómo está funcionando el acuerdo en el 2026. No hay una varita mágica que permita a una parte reescribir el acuerdo sin el consentimiento de las otras dos o de nuestras respectivas legislaturas, si se contemplan cambios en la ley.
“Todo dependerá de un toma y daca y de un enfoque cooperativo”, refirió en un artículo realizado por la Amcham, con pregunta y respuesta, publicado en su portal oficial.
Desde el momento en que el T-MEC entró en vigor, con una vigencia de 16 años, dicha cláusula se activó y en el sexto año se tendrá la primera revisión del Tratado, cuando las autoridades de cada país tendrán que confirmar que quieren seguir dentro del pacto y si las tres naciones confirman que continuarán, el acuerdo se extendería otros 16 años.
Murphy resaltó que México no sólo es el mayor socio comercial de Estados Unidos, sino que probablemente no exista ningún país en el mundo donde haya más potencial sin explotar para asociaciones comerciales más estrechas.
“Esto puede parecer una exageración, dada la rápida expansión del comercio y la inversión, pero no lo es. De hecho, el impedimento más grave para liberar realmente este potencial son las malas decisiones políticas y soy optimista sobre la dirección que tomará América del Norte en este sentido”.
El directivo también abordó el tema de las elecciones presidenciales del 2024, tanto en México como en Estados Unidos.
“Los años electorales son cuando se establece la agenda para el trabajo que viene a continuación. Este es un año para que las empresas se comprometan, hablen y sean específicas sobre qué políticas están funcionando y qué necesita una corrección de rumbo.
“Es imperativo que las empresas tengan un asiento en la mesa: los planes de gasto de capital y las decisiones de contratación que los funcionarios electos esperan fomentar dependen de una buena política gubernamental, una regulación transparente y predecible, una tributación razonable y el mantenimiento de las rutas comerciales abiertas”.
John Murphy, vicepresidente senior y director internacional de la American Chamber en Estados Unidos