(CENTRO DE INVESTIGACIONES BIOLÓGICAS DEL NOROESTE)
Las pesquerías son sustancialmente diferentes de los otros sistemas importantes de producción de alimentos en el mundo (e.g. agricultura): el volumen de pesca es impredecible porque depende de la captura de organismos silvestres en un ambiente no controlado; de esta manera se enfrenta el desafío de estimar los niveles adecuados de extracción sostenible, los cuales son cambiantes en el tiempo. En este sistema, el peso de la responsabilidad de garantizar la mayor producción posible a largo plazo recae principalmente en la administración científica de los recursos marinos.
El Noroeste de México es la región pesquera más importante del país, tanto en volúmenes de captura como en generación de riqueza. En la región se encuentran las pesquerías industriales más desarrolladas del país (e.g. camarón, atún, sardina), y las flotas de pesca deportiva, de altura y ribereña más grandes. Sonora, Sinaloa, Baja California, Baja California Sur y Nayarit contribuyen con más del 82% del volumen total de captura pesquera nacional.
Este desarrollo ha causado una serie de problemas internos en el sector, como el sobredimensionamiento de las flotas, conflictos sociales por acceso a recursos, sobreexplotación y bajo rendimiento económico, que se combinan con factores externos como son la creciente demanda de certificación de sustentabilidad para las exportaciones de productos del mar, y las diversas formas de modificaciones ambientales.
En atención a esta problemática, la línea estratégica 5: Recuperación, ordenamiento y sustentabilidad de pesquerías, se identifica con la misión de investigar la biología básica de los organismos que se capturan, la dinámica de los ambientes donde habitan y los diferentes componentes del sistema pesquero, para contribuir con información técnica robusta, tanto a la toma de decisiones por parte de la autoridad pesquera, como a la planeación de la inversión y las estrategias de desarrollo del sector productivo.
Algunas aportaciones de la línea en las últimas décadas son la generación de insumos para la elaboración de instrumentos de manejo, como la Norma Oficial Mexicana para la pesquería de la almeja de sifón o el plan de manejo de la curvina golfina en el Golfo de California. Recientemente se está apoyando los procesos de certificación internacional de sustentabilidad de las pesquerías de sardina del Golfo de California (Sonora) y sardina crinuda (Sinaloa) ante el Marine Stewardship Council (MSC), con impacto también en Normas Oficiales Mexicanas, el plan de manejo y la integración de fichas técnicas para la Carta Nacional Pesquera.
En otros ámbitos, resaltan el trabajo realizado entre 2005 y 2015 donde con apoyo de organizaciones de la sociedad civil se realizaron investigaciones que desembocaron en el cierre a la pesca con redes de enmalle, cimbra y palangre en el Alto Golfo de California. Posteriormente, con apoyo de CONAHCYT se continuó en el tema para analizar los impactos sociales de dicha acción. Con alcance internacional, figuran la asesoría prestada a los gobiernos de Perú y Ecuador para de manejo del calamar gigante y las colaboraciones como asesores científicos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en temas como la sustentabilidad de la pesca de arrastre de camarón y los efectos del Niño en la pesca (Información sugerida: https://www.fao.org/3/cc7897es/cc7897es.pdf).
Por su naturaleza, la línea trabaja en coordinación con diferentes instancias y niveles de Gobierno. Se han atendido solicitudes de la Cámara de Diputados de la Federación, como el de elaboración de un diagnóstico de la situación social y económica y la planta industrial asociada a la pesquería de jaiba de Sonora. En el marco de un convenio con el Gobierno del Estado de Baja California Sur, se desarrolló el Programa Rector Nacional Fase 1: Diagnóstico y Planificación Regional de la Pesca y Acuacultura en México, presentando a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca un análisis de la situación y problemática de la pesca y la acuacultura a nivel nacional y regional, concluyendo con una serie de estrategias y actividades a considerar por las políticas públicas para el desarrollo sustentable del sector. Uno de los principales resultados de este estudio fue la evaluación formal, por primera vez, del grado de implementación del Código de Conducta para la Pesca Responsable de la Organización de las Naciones Unidas para la Pesca, la Agricultura y la Alimentación (FAO) en México. Desde 2022 se participa en mesas de trabajo organizadas por el Senado de la República para adecuar la Ley de Pesca.
Es de esperar que con el tiempo crezca la importancia de la pesca, tanto en México como en el resto del mundo, al mismo tiempo que aumentan los retos derivados de los cambios que están sufriendo los sistemas marinos. Esto se traduce en la necesidad de realizar investigación orientada en los temas que definen la línea estratégica: la recuperación, ordenamiento y sustentabilidad de las pesquerías. Queda como visión de largo plazo, redoblar los esfuerzos en los enfoques tradicionales y aumentar las capacidades para generar información a través de nuevas temáticas y técnicas, como el análisis, modelación matemática y evaluación bioeconómica de los recursos pesqueros, y la incorporación de enfoques socioecológicos, que analicen las interacciones ecológicas, productivas y de gobernanza sobre las comunidades pesqueras, la valoración de los servicios ecosistémicos y el diseño de estrategias de adaptación del sector para promover su viabilidad a largo plazo.
Para conocer al personal del Programa Académico de Ecología Pesquera de CIBNOR (Unidad La Paz y Unidad Guaymas) ingresar a https://www.cibnor.gob.mx/investigacion/ecologia-pesquera/personal-investigacion-adscrito-pep
Fotografía: ilustrativas. Cortesía del Programa de Ecología Pesquera de Cibnor.