(PATRICIA TAPIA CERVANTES. FORBES MÉXICO)
Desde hace al menos una década Telmex está operando en números rojos y hace un par dejó de dar dividendos, y en palabras del empresario Carlos Slim Helú: ya no es negocio.
De acuerdo con el empresario esto ha sido el resultado de un alto pasivo laboral que se heredó, se contabilizan 41 mil jubilados y se requieren al menos 270 mil millones de pesos para bajar este pasivo.
A esto se suma las barreras que se han tenido en competencia desde hace varios gobiernos, incluyendo al de Andrés Manuel López Obrador, pues acusó que no se ha dejado entrar a Telmex en servicio de televisión de paga.
Ante señalamientos de que ha sido altamente beneficiado por la administración de AMLO, hizo hincapié en que el excluirlos en el mercado de televisión de pago, da cuenta que no es así.
Pero indicó que aun con estas limitantes, “Telmex se defiende” y aunque se tardarán otros años más para aligerar la carga del pasivo laboral, “afortunadamente” ya se están reestructurando las jubilaciones que se dieron a los 48 y 53 años.
Y esperarán “pacientemente” una respuesta a favor del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) para participar en el servicio de televisión de paga.
Respecto a que Telmex fue un regalo para ser privatizado, el empresario se dió a la tarea de contar cómo ha sido su participación en el gran gigante mexicano de las telecomunicaciones.
Desmintió que el costo de Telmex durante la subasta de privatización en 1990, fue bajo, pues este ascendió a 8 mil 615 millones de dólares, una cifra considerablemente alta respecto a los 173 millones de dólares que costaba en 1986.
En conclusión, Slim afirmó que Telmex no fue un regalo, pues además se han tenido que invertir miles de millones de dólares para modernizarlo y sacarlo del rezago y que ahora ya no es rentable, no obstante, es un negocio que no piensa dejar.
Slim propone invertir entre 28 y 30 por ciento del PIB para un mayor desarrollo de México
Ante la propuesta de reducir la jornada laboral a 40 horas, el empresario consideró que el poder adquisitivo y el bienestar de la población no se logra trabajando menos, sino ganando más.
Para el empresario Carlos Slim Helú, hay acciones clave que hacen falta para que México tenga un mayor desarrollo, la principal, es invertir entre un 28 y 30% del PIB.
“Históricamente la inversión ha sido relativamente reducida, creo México se debería ir, y con eso transformamos al país muy rápido a una inversión anual de 28 al 30% del PIB”, dijo en conferencia prensa al ser cuestionado en que debería poner atención el próximo gobierno.
El empresario dijo que esto podría alcanzarse “relativamente fácil”, pues la iniciativa privada ha alcanzado hasta el 18% del PIB.
Entonces, agregó, con que los privados lleguen a un 20%, el gobierno a un 5% y la inversión extranjera a un 4 o 5%, perfectamente se puede alcanzar hasta ese 30% del PIB.
Añadió que estos niveles de inversión llevarían a México muy rápido a un desarrollo, incluyendo el fenómeno del nearshoring.
Otra cosa que se necesita, de acuerdo con el multimillonario, es que se mantenga la política del actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador, de fortalecer el poder adquisitivo de los mexicanos.
Ante la propuesta de reducir la jornada laboral a 40 horas, el empresario consideró que el poder adquisitivo y el bienestar de la población no se logra trabajando menos, sino ganando más.
Indicó que ya en muchas actividades trabajan 40 horas, como en el sector financiero.
En ese sentido, la propuesta de Slim, es que de manera legal, es decir, todos los trabajadores que no laboran sábado, dejar el salario mínimo y los que trabajen 48 horas, subirles 20% el salario.
Finalmente, el magnate comentó que sea quien sea gane las elecciones de 2024, ya sea un gobierno de transición o de consolidación, es viable hacer posibles estas dos acciones y aprovechar el nearshoring.
Carlos Slim. Foto: EFE/Paco Paredes